Las enfrijoladas siempre me traen gratos recuerdos de cuando mi madre las preparaba en casa. Casi siempre ella misma hacia las tortillas pero, aunque no fuera el caso, para mi eran las mejores enfrijoladas del mundo. Si bien podemos encontrar tortillas muy buenas en todas partes, la magia de estas recetas es la de hacer nosotros mismos nuestras tortillas y que todo sea más casero.
Hoy les propongo esta receta de enfrijoladas de pollo, como las preparaba mi madre en casa, Ella las bañaba completamente en salsa de frijol pero en esta ocasión no les pondré tanta salsa para que los sabores estén un poco más equilibrados. Cuando las vayan a servir les pueden poner crema, lechuga picada y queso. Personalmente no pondré estos dos últimos ingredientes pero eso es simple cuestión de gustos personales.